El cielo si existe, estas personas regresaron del mas allá y nos cuentan que es lo que miraron

Se murió la abuelita de Jaime y él lloraba mucho. Recordaba los paseos que hacían los sábados, cómo alimentaban a las ardillas del parque y terminaban siempre tomando helado en la esquina de la casa. Su madre ya no sabía qué hacer para consolarlo, le hablaba de lo mucho que él la había visto sufrir sus últimos días y cómo ella estaba ahora feliz y libre de dolor y sufrimientos. Jaime se consolaba un poco, pero después volvía a llorar.

Un día, sorprendió a su madre preguntándole dónde estaría su abuela. “En el Cielo, Cariño”, le dijo su mamá. Desde entonces, Jaime pasaba horas mirando el cielo. Miraba la forma de las nubes y miraba las noches estrelladas sin acabar de entender cómo su abuelita había ido a parar allá, tan lejos. Un día, su profesora les comentó en clase de un libro que había leído, titulado El cielo es real.

Ahí, se narraba la historia de Colton Burpo, un pequeño de 4 años que afirmaba haber estado en el Cielo sentado en el regazo de Jesús. Jaime se emocionó y anotó los datos del libro para conseguirlo leerlo con su madre. ¡Al fin sabría con detalle a dónde se había ido su abuelita tan querida!

El Cielo, según Colton

La historia nos narra que Colton se sentía terriblemente mal, y sus papás lo llevaron al hospital. En un momento —mientras lo intervenían quirúrgicamente— su alma salió de su cuerpo y realizó un recorrido increíble. Primero, vio a sus padres orando en distintas habitaciones y luego se dirigió al Cielo. Allá se encontró con su bisabuelo y con su hermana que había fallecido por un aborto espontáneo en el vientre de su madre. En el Cielo vio animales, muchos ángeles que cantaban, a varios personajes de la Biblia y también a Jesús, quien lo tomó en sus brazos para que no tuviera miedo. Al despertar de la complicada cirugía, sus padres se llevaron tremenda sorpresa al escucharlo hablar con inusitada seguridad sobre todo lo que había visto aquel día.

Jaime y su mamá leyeron el libro, emocionados. Los detalles que proporcionaba Colton —y que recordaba aún luego del tiempo transcurrido—, en verdad los consolaban y les daban esperanza.

Existen varios testimonios que concuerdan con lo expresado en el libro (el cual, por cierto, más tarde se convertiría en una película que lleva el mismo título). Entre ellos, encontraron los testimonios de Catalina Emmerick, religiosa alemana que dijo tener visiones de varios pasajes de la vida de Jesús y, entre ellas, también vio el Cielo.

El Cielo según Ana Catalina Emmerick

Catalina, religiosa alemana, encontrándose muy enferma se sintió también transportada al Cielo, y afirma que se sorprendió por la extrema belleza del lugar, que va mucho más allá de lo que los ojos humanos nos permiten ver. De colores brillantes e iridiscentes, las almas de quienes ahí habitan están inmensamente felices. Desde allí vio la Tierra como un lugar gris, muy lejana a la majestuosidad que miramos al ver retratos del espacio, donde nuestro planeta se ve tan hermoso.

Esa noche, Jaime durmió feliz. Soñó con altas y blancas ciudades llenas de color, con hermosa música y flores que cantan, todas acompañando a esa gran mujer que tanto cariño le había dado en la Tierra. Al llegar su madre a arroparlo no pudo evitar las lágrimas, al verlo luego de tantas noches tristes, con una sonrisa pintada en su cara dormida.

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