Un esposo le hace una carta a su esposa, dando a conocer que estaba cansado de tanta indiferencia y tanta angustia que él sentía de ella, pues las cosas no son como parecen, el esposo se sentía abandonado y muy mal por la forma en que supuestamente su esposa se estaba comportando, esto es una gran enseñanza moral que nosotros como esposos debemos de tomar en cuenta antes que sucede algo con nuestro matrimonio.

En la carta dice que desde hace dos semanas ella se estaba comportando mal y que no aguantaba, solo ella sabía que era lo que pensaba en ese tiempo, pero el esposo estaba decidido a que ya no iba a aguantar más.

El esposo se dice sentir satisfecho por ser un buen marido por 7 año y le reclama que porque había renuncia, él se dio cuenta por medio del jefe, el cual había recibido la llamada de él, preguntando del porque había renunciado.

El esposo le dice que había comprado ropa interior de seda, se había cortado el pelo, pero lo que no le gustó es que no le dijo nada. Y todo esto más con la cena que había preparado para ella, la cual comió rápido y vio sus novelas y fue a la cama sin decir nada.

Y el colmo de los colmos hasta le dijo que se iba a ir con su hermana.

Ahora viene la contraparte, la esposa le respondió con una carta y se marchó de la casa, y tremendo susto que se llevó el pobre esposo.

Todo lo que este esposo frustrado le contó en esta carta, la esposa le tenía una respuesta muy contundente, para los 7 años pasaron desastrosamente, y el buen esposo que él pensaba que era, ella no lo aceptaba, las novelas las utiliza para distraer y no poder escuchar las enormes quejas que este marido a diario le decía a su esposa.

Con respecto al corte de pelo, ella estaba acostumbrada a no decir nada si algo iba a desmotivar a alguien, porque el corte de pelo era como que de una mujer se tratara. La comida que le preparó el esposo se confundió y pensó que a la esposa le gustaba el cerdo, pero ella le enfrascó que la hermana era la que comía cerdo, ella tenía 7 años que no comía.

Pero lo peor de todo fue cuando le respondió sobre la ropa interior y recordaba que su hermana le pidió prestado esa misma cantidad la cual fue 50.00 dólares, eso es lo que costaba la ropa, ya que tenía todavía la viñeta.

Ella se había sacado la lotería y estaba dispuesta a hacer una vida bonita con su esposo, y compró dos boletos hacia Jamaica, los cuales no usó por la sorprendente carta, y le recalca, que la hermana con la que se fue su esposo, nació siendo hombre y se operó para ser una mujer.

Y finaliza que el abogado que le está viendo el divorcio le aconsejó usar la carta del esposo como prueba para no darle nada de dinero en el divorcio.