7| Y como piensan que comes poco, siempre te vigilan cuando lo haces
Ya sean tus familiares alarmados de lo poco que comes (aunque en realidad hayas comido IGUAL que todos) o ese chico con el que sales sorprendido que comiste como persona normal, no puedes alimentarte sin que alguien diga su opinión (¡que nadie pidió!)
6| No puedes ganar peso sin importar cuánto comas
Y no te puedes quejar, pues todos “amarían tener ese problema”. Claro, como ellos no se enfrentan a estas dificultades no tienen la menor idea, pero pongan atención gente: para algunos es tan difícil ganar peso como para otros perderlo
5| Todos cuestionan tus ganas de hacer ejercicio
Por alguna extraña razón TODOS piensa que si haces ejercicio es para adelgazar. Si lo haces para estar saludable o tener un cuerpo más firme nadie te cree, y si eres flaquita simplemente estás loca. Esto se relaciona con el siguiente punto:
4| Toda la ropa te queda floja o muy ceñida
Cuesta mucho explicar que vas al gimnasio para ganar músculos y que la ropa te quede: todos piensan que la ropa está hecha para la gente delgada. Simplemente no es así, pues las flaquitas tenemos tantos problemas para encontrar talla como la gente con sobrepeso.
3| Los chistes sobre lo flaca que estás
“¡Te va a llevar el viento!”, “Te voy a romper”, “Pareces un palito”; estos y otros tantos chistes malos los escuchas a diario, y aunque te ríes para ser cortés esas bromitas dejaron de dar risa desde que tenías 8 años.
2| Te dicen que te verías mejor si “aumentaras unos kilos”
¿Y el cielo es azul, no? No tienen que decirte lo que ya sabes o incluso estás intentando hacer con esa difícil dieta. Sin embargo no debes olvidar lo más importantes: eres hermosa tal y como estás.
1| “¿Eres bulímica? ¿O sólo anoréxica?”
Ninguna de las dos. Algunos lo dicen, pero la mayoría piensa que tienes un desorden alimenticio sólo por la complexión de tu cuerpo. Aunque pueden doler no hagas caso a estos comentarios: tú conoces tu cuerpo y sabes cómo es, y que algunos puedan diferenciar entre un cuerpo sano y delgado y un trastorno mental no es tu problema.
Como ves nadie se salva de los prejuicios, y la falta de conocimientos del cuerpo y vida de otros provoca que juzguemos los problemas de su vida equivocadamente. Si eres flaquita y te sentiste identificada con alguno de estos problemas, ¡comparte la nota para crear consciencia!